En nuestros días, cada vez, aumenta el número de jeques, empresarios, magnates o consorcios inversores que ejercen influencia sobre dos o más clubes de fútbol. En ciertas instancias, llegan a tener bajo su dominio hasta 13 equipos, distribuidos en diversas ligas, naciones y continentes, esto es conocido como “multipropiedad”.
El imperio del Manchester City o Red Bull son los más conocidos pero cada vez son más los magnates o jeques con muchos clubes de fútbol en cartera.
Un fenómeno que solía ser aislado hace varias décadas, como el caso de ENIC, ahora se ha vuelto común y su presencia sigue en aumento. «Comenzamos con el ejemplo del City, que controla 11 clubes, y observamos a gigantes como Red Bull, Red Bird o 777 Partners. La multipropiedad de clubes es un fenómeno emergente; el fútbol está más dinámico que nunca y atrae a una creciente cantidad de inversores», declaró Andrea Agnelli en la Junta de Accionistas que marcó su despedida de la Juventus.
Sin embargo, según el informe anual ‘The European Club Footballing Landscape’ de la UEFA, se advierte que la multipropiedad «podría constituir una amenaza palpable para la integridad de las competiciones europeas de clubes». Se señala que es cada vez más probable que dos equipos con propietarios compartidos, o parcialmente compartidos, se encuentren en el terreno de juego.
Un ejemplo reciente de este fenómeno es el caso de Savinho. El Troyes, equipo perteneciente al City Group, adquirió al jugador por 6,5 millones de euros del Atlético Mineiro en el verano de 2022. Posteriormente, lo cedió al PSV Eindhoven y este verano realizó una operación similar con el Girona (también parte del City Group). A partir del 1 de julio, sin haber debutado con el Troyes, el jugador brasileño se unirá al club más destacado dentro del paraguas del City Group, el Manchester City. Esta cadena de movimientos genera preocupación en muchos círculos dentro del ámbito del fútbol. No obstante, es importante destacar que el fenómeno de la multipropiedad va mucho más allá del City Group.
En el año 2008, el Abu Dhabi United Group adquirió el Manchester City, transformando la narrativa de la Premier League. Los ‘cityzens’, respaldados por la influencia financiera del estado del Golfo Pérsico, se erigieron como una potencia tanto en Inglaterra como en Europa. Este ascenso se materializó gracias a las contribuciones económicas, directas e indirectas, de Emiratos Árabes Unidos. Mansour bin Zayed Al Nahyan, viceprimer ministro y miembro de la familia gobernante en el país, lidera el City Group, que también cuenta con inversionistas chinos y estadounidenses.
Bajo el paraguas del City Group, se encuentran diversos clubes alrededor del mundo, extendiendo su influencia global:
– Manchester City (Mánchester, Inglaterra)
– New York City (Nueva York, EE. UU.)
– Montevideo City Torque (Montevideo, Uruguay)
– Troyes AC (Troyes, Francia)
– Girona FC (Gerona, España)
– Lommel SK (Lommel, Bélgica)
– Mumbai City FC (Mumbai, India)
– Yokohama F. Marinos (Yokohama, Japón)
– Sichuan Jiuniu FC (Chengdu, China)
– Melbourne City FC (Melbourne, Australia)
– Palermo FC (Palermo, Italia)- Club Bolívar (La Paz, Bolivia) – socio estratégico
El Manchester City, en sus primeros años, se mantenía como un club histórico a la sombra del United en su propia ciudad. Aunque en las décadas de los 60 y 70 logró establecerse entre la élite del fútbol inglés, no fue sino hasta 2008, con la llegada de Abu Dhabi, que comenzó su metamorfosis hacia la grandeza. Desde 2013, el City Football Group ha tejido una red global, primero en América (New York City), después en Australia (Melbourne City) y más tarde en Asia (Yokohama F. Marinos). En la actualidad, cuenta con 12 clubes dispersos en cinco continentes, cada uno con distintos grados de conexión.
La joya de la corona sigue siendo el equipo de Mánchester. El City ha evolucionado para convertirse en uno de los equipos más destacados del planeta. Desde 2008, ha alzado 17 trofeos, llegando a la final de la Liga de Campeones en 2021, y ha atraído a estrellas como Haaland, Agüero, Silva y De Bruyne. Pep Guardiola lidera con éxito desde el banquillo. Han redefinido la jerarquía tanto en la Premier League como en el panorama futbolístico europeo. Los clubes afiliados al City Football Group también se ubican en la cima de sus respectivos países o aspiran a alcanzar ese estatus en el futuro cercano.
Por otro lado, La pasión por el deporte siempre ha sido una prioridad para Red Bull, la destacada marca de bebidas energéticas que ha generado considerables ingresos para sus fundadores: el empresario austríaco Dietrich Mateschitz y el tailandés Chaleo Yoovidhya. Estos visionarios han canalizado con éxito sus ganancias hacia diversas aventuras deportivas, desde disciplinas extremas como BMX, esquí y vuelo, hasta el triunfo en la Formula 1, donde se han coronado campeones de constructores en múltiples ocasiones y han visto a pilotos como Vettel y Verstappen alzarse con la victoria. La incursión de Red Bull en el fútbol ha dejado una huella global, con clubes estratégicamente ubicados:
– RB Leipzig (Leipzig, Alemania)
– Red Bull Salzburg (Salzburgo, Austria)
– Red Bull Bragantino (Bragança Paulista, Brasil) – New York Red Bull (Nueva York, EE. UU.)
En el año 2005, Red Bull adquirió el club austríaco SV Austria Salzburgo, rebautizándolo como Red Bull Salzburgo. Posteriormente, transformaron los destinos del MetroStars al comprarlo y convertirlo en el New York Red Bulls. En 2007, Red Bull se aventuró en Brasil con la adquisición del Red Bull Bragantino, y en 2009 realizaron un movimiento audaz al comprar el SSV Markranstadt de Leipzig, que se encontraba en la quinta categoría del fútbol alemán, rebautizándolo como RB Leipzig. En 2017, ya estaban compitiendo en la Bundesliga y desde entonces han participado en cinco ediciones de la Liga de Campeones. A pesar de ser considerados el «enemigo público número uno» en el fútbol alemán, el proyecto ha demostrado ser exitoso. Oliver Mintzlaff ocupa el cargo de director global de fútbol en el imperio Red Bull GmbH desde 2014.
Especialmente destacado ha sido el ascenso del RB Leipzig, consolidándose como un equipo de élite en la Bundesliga y participando en cinco ocasiones en la Liga de Campeones, logrando su primer título de la DFB Pokal la temporada pasada. Por su parte, el RB Salzburgo ha dominado sin rival en Austria, celebrando el título en 13 ocasiones consecutivas. Además, su eficaz sistema de detección de talentos ha identificado a futuras estrellas como Haaland, Mané, Kimmich, Nkunku, Konaté, Keïta, y el intercambio de jugadores entre Salzburgo y Leipzig ha fortalecido significativamente al club alemán.